Es una patología de causa desconocida, progresiva, poco frecuente y no tiene cura. Diagnosticarla no es tan simple, es un proceso complejo. El neumólogo debe realizar una serie de evaluaciones que incluyen: historia clínica prolija, examen físico, pruebas de laboratorio, defunción pulmonar y tomografías

El principal factor de riesgo, como en otras enfermedades degenerativas, es la edad y suele ser algo más frecuente en hombres. Como toda patología progresiva pulmonar sus síntomas son tos y falta de aire. En estados avanzados hay pérdida de peso y compromiso severo para hacer las cosas de manera independiente

Los medicamentos que se usan solo disminuyen la velocidad del avance del padecimiento, dándole a los pacientes más tiempos de un estado funcional aceptable. Es importante que se vacunen para prevenir infecciones. En países donde es posible, el trasplante de pulmón es una opción

Dr. Gonzalo Gianella
Neumólogo de la Clínica Ricardo Palma