La conjuntivitis alérgica es una entidad muy común que se produce cuando los ojos reaccionan a algún alérgeno. Esto provoca la liberación de una sustancia llama histamina, y como resultado se producen los síntomas más comunes de este cuadro. La Dra. María Zúñiga, oftalmóloga de nuestra clínica, nos enseña a reconocer los síntomas de la conjuntivitis alérgica, qué hacer ante ella y cómo prevenirla.
¿Cuáles son los síntomas más comunes de la conjuntivitis alérgica y cómo se diferencia de otras formas de conjuntivitis?
- Los síntomas más comunes son ojo rojo, picazón ocular, lagrimeo; además de, ocasionalmente, inflamación de los párpados.
- A diferencia de otros tipos de conjuntivitis, no es contagiosa y suele estar asociada a otros cuadros alérgicos como rinitis, asma o dermatitis atópica.
¿Cuáles son las causas más frecuentes de la conjuntivitis alérgica?
- Cuando el alérgeno entra en contacto con los ojos, los mastocitos liberan histamina y otras sustancias para combatirlos produciendo la sintomatología.
- Entre los múltiples desencadenantes tenemos al pelo de las mascotas, el polvo, el polen, perfumes, humo, moho, algunos alimentos, etc.
¿Cómo tratar la conjuntivitis alérgica?
- Los antihistamínicos tópicos y estabilizadores de mastocitos alivian la picazón, lagrimeo e irritación y se usan de 1 a 2 veces al día (dependiendo del medicamento).
- Los corticoides tópicos ayudan con síntomas crónicos y graves de la alergia, sin embargo, nunca deben usarse sin supervisión médica.
- Las gotas de lágrimas artificiales pueden ayudar a eliminar temporalmente los alérgenos y alivian los ojos secos irritados por el cuadro.
¿Cómo podemos prevenir la conjuntivitis alérgica?
La clave para evitar este cuadro es evitar el contacto con sustancias que lo provocan. Por ello, en muchas ocasiones, es necesaria la evaluación de un alergista. La prevención depende del alérgeno que desencadene el cuadro:
- En el caso de alergia al polen, evite salir al aire libre cuando la concentración de éste se encuentre en su punto más alto (mitad de la mañana y atardecer).
- En el caso de que el desencadenante sea el moho, limpie con frecuencia los espacios con humedad y considere usar un deshumidificador.
- Si la causa son los ácaros del polvo, considere mantener los ácaros fuera del contacto con la piel y lave la ropa de cama regularmente con agua caliente.
Nuestra especialista recomienda:
- Evita frotarte los ojos, ya que esto sólo hace que los síntomas empeoren.
- Evita el uso de descongestionantes tópicos de venta libre por más de 2 a 3 días, pues pueden empeorar la irritación.
- Visita a tu oftalmólogo con regularidad para descartar cualquier tipo de afección ocular.
Dra. María Zúñiga
Oftalmóloga de l Clínica Ricardo Palma