Los tumores de hipófisis son lesiones proliferativas, generalmente de naturaleza benigna, que afectan la glándula llamada hipófisis, la cual está alojada en la base del cerebro, detrás de la nariz. Como todos los tumores, su origen está asociado a una alteración genética en algún grupo celular de la glándula hipófisis, lo que hace que las células se multipliquen anormalmente dando origen al tumor. En esta oportunidad el Dr. Marco Chipana, neurocirujano de la Clínica Ricardo Palma, nos brinda información importante sobre el tema.

¿Existen causas o factores de riesgo?

No hay una causa o factor establecido para la formación de estos tumores.

¿Cuáles son los síntomas?

Generalmente son síntomas por cambios hormonales, como:

• Fatiga
• Cansancio
• Alteración o falta de menstruación
• Disminución de deseo sexual
• Crecimiento exagerado de manos y pies
• Estrías abdominales con obesidad, entre otros

También se pueden presentar síntomas por afección visual, como: disminución del campo visual y deterioro visual acelerado.

¿Cómo se diagnostican?

El diagnóstico se establece con una resonancia magnética nuclear de silla turca. Sin embargo, muchas veces ya se va estableciendo su presunción con pruebas hormonales, evaluación endocrinológica y oftalmológica, así como campimetría visual. Es por ello, que con cierta frecuencia los diagnósticos los realizan los endocrinólogos o los oftalmólogos, para ser derivados luego con el neurocirujano.

¿En qué consiste el tratamiento?

El tratamiento puede iniciar con pastillas que contrarresten los cambios hormonales y eventualmente reduzcan el tamaño de los tumores. Sin embargo, cuando estos no responden a los fármacos o generan otras complicaciones, se requiere intervención quirúrgica, la cual se realiza a través de las fosas nasales o mediante una craneotomía (corte del cráneo). En algunos casos se puede usar la radiocirugía (forma especial de radioterapia).

¿Cómo se puede prevenir?

No existe una medida de prevención; sin embargo, se puede detectar en etapas tempranas si se acude al médico cuando empiecen los síntomas hormonales y/o visuales, pudiendo así, lograr un buen pronóstico conforme más precoz sea su diagnóstico.

Dr. Marco Chipana
Neurocirujano de la Clínica Ricardo Palma