Las escaldaduras en bebés, suelen ser muy comunes y afectar la delicada piel de nuestros engreídos. Estas irritaciones cutáneas pueden ser leves o causar preocupación en los padres, cuando la inflamación es mayor. La Dra. Patricia Giglio, dermatóloga de nuestra clínica, nos explicará qué hacer ante las escaldaduras, a fin de proporcionar alivio y cuidado efectivo para el bienestar de nuestros bebés.

¿Qué es una escaldadura?

• Es una inflamación en la piel, que ocurre por la maceración en la zona de pliegues, sobre todo en el área inguinal, es decir, el área del pañal, debido a que esta zona acumula mayor humedad, factor principal para desencadenar una escaldadura.
• Los bebés que usan pañal son los más propensos a presentar escaldaduras, pues suelen ser más rollizos y presentar más pliegues en la piel. Además, el material del pañal es sintético y brinda más calor, sobre todo en épocas de altas temperaturas.

¿Qué puede suceder si no se tratan las escaldaduras?

Si no son tratadas de modo correcto y oportuno, las escaldaduras pueden generar una serie de lesiones y complicaciones en la piel el bebé, por ejemplo:

• Sobreproducción de otros organismos, como la levadura cándida, mayormente conocida como intertrigo candidiásico (infección por hongos).
• La piel afectada puede volverse más sensible y propensa a desarrollar úlceras o incluso llagas abiertas, especialmente en áreas donde hay fricción constante, como los pliegues de la piel.
• Pueden causar dolor, picazón y malestar en el bebé, haciendo que se sienta incómodo, irritable e incluso afectando su calidad de sueño.
• Si las escaldaduras persisten, pueden desencadenar una dermatitis de contacto, que es una reacción inflamatoria crónica de la piel en respuesta a irritantes, entre otras complicaciones.

Tratamiento y medidas preventivas de las escaldaduras en nuestros bebés:

• Las escaldaduras pueden combatirse desde casa, teniendo el cuidado necesario. Es importante el cambio frecuente del pañal, el uso de pomadas anti escaldaduras para bebés a base de óxido de zinc y otros componentes desinflamantes naturales a base de caléndula, manzanilla, etc., las cuales son muy efectivas. Se pueden realizar lavados con agua de manzanilla, para desinflamar la piel.
• Luego del baño, debemos secar correctamente la zona del pliegue.
• Si con estas medidas básicas la piel del niño no mejora, se debe acudir al médico dermatólogo por la posibilidad de requerir cremas con antinflamatorios como corticoides tópicos o el uso de cremas antimicóticas, de confirmarse una infección sobreagregada.

Recuerda:

Algunos signos ante los cuales los padres deben llevar al bebé a un dermatólogo, para recibir tratamiento adecuado y eficaz, son: mayor área de enrojecimiento e irritabilidad del menor, pequeños granitos con materia amarilla o blanca cerca de las escaldaduras o ulceraciones en la piel.

Dra. Patricia Giglio
Dermatóloga de la Clínica Ricardo Palma