“Muchas veces nos creemos autosuficientes y no acudimos a una terapia, nos relegamos dando más importancia a ayudar a los demás antes que a uno mismo. Solo si atendemos nuestra salud mental, podremos ayudar a los demás, de lo contrario nuestra vida personal, familiar y laboral se verá afectada. Tener una buena salud mental nos ayuda a tomar buenas decisiones, a progresar en nuestros logros personales y a no dejarnos interrumpir por los síntomas agravantes de la ansiedad o la depresión”, señala Antonella Galli, psicoterapeuta cognitivo conductual de nuestra clínica.

¿Cómo reconocer que se necesita ayuda profesional?

Si te cuesta realizar tus actividades diarias en casa, el trabajo o centro de estudios, es necesario indagar la causa:

• Los síntomas de la depresión abarcan dificultades para dormir, baja energía, desmotivación, irritabilidad, mayor sensibilidad, problemas de concentración, cambios en el apetito, mayor inseguridad y aumento de pensamientos negativos sobre uno mismo, los demás y el futuro.
• En caso de ansiedad, los síntomas incluyen tensión corporal, dolor en varias partes del cuerpo, dificultad para concentrarse y dormir, aumento del ritmo cardíaco y estar hiperalerta, sensibilidad al ruido, sobresaltos y pensamientos catastróficos a futuro.
• Si tienes un estrés sostenido en el tiempo, te causará tensión muscular, trastornos del sueño, problemas gastrointestinales, dolores de cabeza, aumento del azúcar en la sangre e irritabilidad.
• Si no superas eventos traumáticos del pasado y evitas cualquier situación que sea similar, puedes perjudicar tu vida personal, familiar y laboral.
• Un duelo no resuelto puede llevar a la depresión, por pensamientos persistentes sobre el vacío que dejó esa persona que ya no está presente.

Nuestra especialista recomienda:

• Ponte como prioridad y cuida tu salud física y mental.
• Equilibra tu tiempo con deporte, relajación y meditación para reducir el estrés.
• Duerme de 7 a 8 horas diarias para evitar la elevación del cortisol (hormona del estrés).
• Rodéate de personas que te equilibren emocionalmente. El nivel de estrés se reduce si se tiene soporte social.
• Busca ayuda y acompañamiento profesional si enfrentas ansiedad, depresión, duelo prolongado o traumas no resueltos.

Antonella Galli
Psicoterapeuta cognitivo conductual de la Clínica Ricardo Palma