“El calostro, líquido amarillento y espeso que sale en poca cantidad de las mamas los primeros días post parto, es altamente inmunológico y se le considera la primera vacuna para el recién nacido. Por ello, es vital que el bebé tenga contacto inmediato con la piel de su mamá apenas nace, para facilitar que inicie lactancia materna lo más pronto posible”, señala la Dra. Sarah Vega, pediatra neonatóloga de nuestra clínica, coordinadora del Perú ante el Consejo Internacional de Certificación de Consultores en Lactancia – IBCLCE y asesora del Comité de Lactancia Materna de la Asociación Latinoamericana de Pediatría – ALAPE, quien nos explica 10 cosas que debemos saber sobre la lactancia materna.

1. El calostro, llamado “oro líquido”, contiene sustancias que protegen las mucosas del intestino, nariz y garganta del recién nacido, frenando la entrada de virus y bacterias.
2. El tamaño de los pechos no influye en el éxito de la lactancia, pues lo importante es el tamaño de la glándula. Hay senos pequeños que en su mayor parte son glándula y las madres son excelentes productoras de leche.
3. La lactancia materna continuada por más de 1 año disminuye hasta en un 30% el riesgo de que la madre sufra cáncer de seno y ovarios.
4. La madre debe recibir orientación para mantenerse bien alimentada y que no consuma sus reservas nutricionales cuando alimente al bebé. La leche materna siempre será de excelente calidad, salvo casos de desnutrición materna severa.
5. Tomar grandes cantidades de leche de vaca, avena, agua de cacao o hinojo, no favorece la producción de leche y puede causar alergias al bebé. La producción de leche materna aumenta al amamantar seguido al bebé o extraerse la leche en el trabajo por lo menos 2 veces en jornadas de 8 horas, siendo lo ideal 3.
6. La calidad de la leche no se altera por sufrir estrés o ansiedad, y sigue siendo el mejor modo de proteger al bebé ante enfermedades como diarreas, infecciones respiratorias, otitis, leucemia, sobrepeso y obesidad, etc.
7. Investigaciones demuestran que los niños que reciben lactancia materna tienen un nivel más alto de inteligencia verbal-lingüística y un coeficiente intelectual superior, en comparación a aquellos que no continuaron con esta práctica después de los 6 meses.
8. La leche materna continúa siendo un gran alimento luego de los 6 meses, una fuente importante de energía, proteínas, vitaminas, grasas y de nutrientes que permiten al bebé crecer fuerte y sano. Estudios evidencian que la lactancia materna reduce considerablemente el riesgo de morbilidad y mortalidad.
9. La lactancia materna debe ser exclusiva los primeros 6 meses, complementándose después con alimentos que incluyan proteínas de origen animal como carnes, hígado de pollo, sangrecita y bazo. La OMS aconseja la lactancia materna continuada hasta los 2 años o más debido al aporte calórico y nutricional de calidad que brinda al bebé.
10. Las relaciones sexuales no afectan la producción de la leche. Son muy saludables para preservar la buena relación de pareja tan importante para la crianza del bebé.

Dra. Sarah Vega
Pediatra neonatóloga de la Clínica Ricardo Palma